Paprika, Gulash y Sziget. Sziget Festival. Día 4

El viernes 10 de Agosto será un día que yo creo que nunca en nuestras vidas Olga y yo olvidaremos porque fue uno de los mejores días que hemos pasado los dos juntos en la relación que ya llevamos algunos años. No es que nos hayamos comprometido para casarnos o que tuviésemos un hijo, es algo mucho menos trascendental pero mucho más divertido y mundano, para Olga era su primer festival y para mi era el primer festival fuera de España, un día entero dedicado a la música donde encontraríamos gente de muchos rincones del mundo, curiosamente ese día no encontramos a ningún español entre el público y eso que había un grupo español en el cartel. Era el día que iríamos al Sziget Festival.

Para las entradas no hay problema porque desde España se pueden comprar y así lo hicimos, con un precio mucho más moderado que cualquier festival que se celebre en España, en el año 2012 se cumplían 20 años de la celebración del primer Sziget, fue caer el Muro de Berlín y que estos países del Este de Europa pasasen al sistema capitalista y nació Sziget, uno de los festivales más importantes de toda Europa y símbolo del aperturismo del pueblo húngaro. En esta entrada contaré lo bien organizado y lo estupendo que fue ir a comprobarlo.

El festival se celebra en la isla de Obuda, muy cerca de Budapest, como ya dije en la entrada anterior, en Deák Ferenc Ter hay un stand del festival y te indican como llegar. Era bastante fácil, cogiendo el metro en la línea 2 (roja) llegas a la estación de Batthyany Ter que está en la parte de Buda, desde ahí y completamente gratis te cambias a la red de cercanías, en concreto a la línea violeta hasta la estación de Filatorigát que es donde se encuentra la isla de Obuda, durante el trayecto pasamos los puentes de Margit hid y Arpad hid. Preguntamos al personal de la estación como podríamos hacer la vuelta otra vez a Budapest y nos llevamos la agradable sorpresa que durante toda la noche el servicio estaría en funcionamiento y que no habría problema para volver a la ciudad, era el principio de muchas agradables sorpresas.

Tras un pequeño paseo bajo un sol de justicia llegamos a la entrada del festival, pasas un puente muy viejo y ya están los controles de acceso, aquí es donde llegó la segunda sorpresa agradable que fue que no tuvimos que hacer cola alguna para que nos pusieran las pulseras del festival y nos dieron un libreto con horarios, mapas y de todo para el festival. Hay que ser auto críticos con los eventos que se celebran en España, yo me he pasado hora y media haciendo cola para que me pusieran una triste pulsera para pasar a algún festival, me he perdido algún concierto por esta cuestión y que tengas que llegar a un país que es Hungría y veas lo bien que tienen todo montado, se te caen las lágrimas de emoción de que te traten como un ser humano y cliente que se ha gastado un dinero. Sin duda puedo decir Sziget ha sido el mejor festival que he estado.

Una vez dentro ya te encuentras al típico público festivalero que hay en todas partes, modernos, hipsters, poperos y bastante buen rollo. En el lugar donde se celebra el evento hay gran cantidad de árboles y chiringuitos para comprar, comer y beber. Todo estaba muy limpio y la gente era bastante consciente de que eso no podía ser un basurero. Llegamos pronto para comer allí y así después empezar a ver los conciertos que llevábamos apuntados. Para gastar en el festival tienes que sacarte una tarjeta que recargabas con dinero y que si luego te sobraba al irte te lo devolvían, otro aspecto que nunca me ha pasado en España, si comprabas de más pues te lo comías, es que era una cosa detrás de otra y la comparación era odiosa. Dimos una pequeña vuelta para ver el lugar y decidimos sentarnos en uno de los chiringuitos bastante cerca del escenario principal, iban a ser muchas horas y queríamos hacernos al sitio, había muchísimas cosas para ver, mercadillos, atracciones, talleres, etc... Era bastante fácil localizarte dentro del recinto porque habían hecho avenidas tal y como si fuese una ciudad, estaba la Avenida John Lennon, Janis Joplin, Kurt Cobain, Freddy Mercury, Jim Morrison o Bob Marley, imposible perderte.

Pero claro, allí lo que uno va a ver son los conciertos y empezamos haciendo patria y yendo a uno de los escenarios secundarios para ver un ratito al grupo andaluz La Selva Sur, con el calor que hacía le echaron mucho ánimo y ante escaso público Olga bailaba, yo esperaba sentado porque pronto tendríamos que volver al escenario principal para el primer gran concierto del día, a las 4:30 p.m. empezaron a tocar los ingleses The Vaccines y multitud de público se agolpaba en el escenario principal con banderas de muchos países, así a bote pronto recuerdo de Gran Bretaña, Irlanda, Rumanía, Alemania y sorpresas como Sudáfrica y Australia, era como que se iba a formar una gran batalla pero simplemente era un concierto. Quiero también mencionar lo bien que se comportaba el público, apenas había móviles grabando, la gente respetaba tu espacio, no estaban de chachara y había buen rollo, estábamos allí para pasarlos todo en grande sin más pretensiones, otra vez que la comparación respecto a España salíamos perdiendo por goleada.

Tras terminar el concierto de The Vaccines que estuvieron correctos y cumplidores, nos encaminamos a uno de los escenarios cubiertos, el A38, a ver si nos daba tiempo a ver tocar un poquito el final del concierto de Wild Beasts, llegamos a la última canción pero se agradecía el aire acondicionado de la carpa y pasamos unos minutos sin música allí. Después fuimos a ver a un grupo italiano que no conocíamos y que iban a empezar en otra de las carpas cubiertas pero ni siquiera los vimos porque no estaban cumpliendo con el horario, del nombre ni me acuerdo ni lo quiero buscar.

Tras salir de la carpa nos topamos con unas chicas muy simpáticas que estaba en un stand de publicidad y nos daban Coca Cola Zero gratis, nos vino estupendamente para nuestra sed y nos quedamos por el lugar haciendo unas fotos. Enfrente del stand de las chicas de la Coca Cola estaba el pequeño escenario dedicado al blues y al jazz y allí nos quedamos sentados un rato, recuerdo que había un tío que o estaba un poco loco o iba puestísimo porque no paraba de dar vueltas y bailar desenfrenado, pero bueno, no molestaba a nadie y nosotros tras descansar un poquito, fuimos a investigar que más tenía el festival. Resulta que también había un escenario dedicado íntegramente para grupos de Hungría pero no conocía a ninguno. Tras ver la tirolina y la noria del festival que se llamaba Sziget Eye nos tocaba el siguiente concierto.

De nuevo en el escenario principal con gran puntualidad y con mucho público portando sus banderas, empezaban los primeros acordes de 'Angels' del grupo inglés The XX. El calor ya no apretaba tanto y para ser un grupo que es mejor escucharlo en una sala que al aire libre y en un festival, hicieron un estupendo concierto que a Olga le impresionó, tocaron los mejores temas de sus albumnes 'Coexist' y 'The XX', mención especial para su tema 'Infinity' que al ser todavía de día cuando sonó en el escenario no se podía ver el efecto deseado de luces que el grupo quería mostrar, pero todo fue bastante bien y salimos muy contentos del concierto.

Antes del plato fuerte del festival nos fuimos de nuevo a los mercadillos porque antes de The XX le había echado un vistazo a un bolso que me gustaba y se adaptaba a lo que necesitaba, así que fuimos al puesto a comprarlo porque después nos arriesgábamos a que estuvieran cerrados. Enseguida volvimos al escenario principal y pillamos algo de beber para ver nuestro último concierto del Sziget, en el Sziget Eye se reflejaba los conciertos que quedaban con sus horarios. Recuerdo con gran cariño por parte de Olga que me daba las gracias por haber tenido tan buena idea para estas vacaciones y que le estaba gustando mucho el plan de venir al Sziget, a mí me dio eso mucha alegría porque me gusta ver a la gente feliz con planes que a mi también me gustan y que te den las gracias por eso pues a mi me parece importante, es un detalle hacia la otra persona que lo está haciendo gustosamente por los dos.

Y por fin a las 9:35 p.m., un pelín más tarde de la hora programada salían los de Manchester con Ian Brown a la cabeza, The Stone Roses, por fin veía a este grupo mítico del indie de los 90's que como se habían separado tienen apenas 2 discos pero que en directo recomiendo a todo el mundo verlos. Tocaron casi todo se repertorio empezando por la famosa 'I wanna be adored' y lo pasamos en grande, no hubo momentos de bajón y flipaba como ondeaban las banderas entre el público. Todo un acierto el cartel de ese día en el Sziget aunque todos los cabezas de cartel eran británicos. Sobre las 11:20 p.m. se acababa la programación del escenario principal para ese día.

No nos íbamos a ir tan pronto del Sziget porque se hubiesen acabado los conciertos, nos quedamos a cenar que fuimos a un puesto que ponían unos bocadillos muy ricos y que había mucha gente, nos sentamos por ahí y la noche ya estaba de lleno en el festival y todo estaba iluminado, había que tomarse algo para relajarse, menos mal que nos llevamos algo por si hacía frío porque a esas horas lo necesitamos, los puestos de comida y bebida estaban a tope y el ambiente era estupendo.

Tras más de 10 horas de festival nos fuimos de nuevo para el tren, en Filatorigát había una composición esperando a que llegase gente para que se llenase y así irnos para Batthyany Ter, a nosotros nos dio tiempo a montarnos e íbamos todo el mundo medio destrozado de un día tan largo pero a la vez muy contentos. En Batthyany Ter tuvimos Olga y yo la mala ocurrencia de volver al Sofitel andando, veíamos que estábamos casi enfrente del parlamento en la parte de Buda y nos pareció que no era mucho andar, luego fue casi media hora jejejee... La verdad es que no me importó mucho ese paseo, lo único es que ya me iba molestando un poco el tobillo, pero la Luna se reflejaba en el Danubio, Olga y yo íbamos comentando los conciertos y lo bien que lo habíamos pasado y fue la última vez que atravesé el Puente de las Cadenas. Sin duda un día que guardaré en la memoria dentro de mis viajes como el día del lago en Helsinki con Tuomas, la cena en el barrio tokiota de Shibuya con David, ver la aurora boreal en Islandia con mis amigos o el bonito día que pasamos Olga y yo en Turín.



Puente para llegar a la entrada del Sziget.



Acceso al Sziget.



Escenario principal a las 3:00 pm, bastante calor.



Aquí el par de modernos echándose la foto para que quedase constancia de su presencia.



Escenario flower power.



Más escenarios, tocando La Selva Sur (España).



El escenario principal anunciando los cabezas de cartel del día. The XX y The Stone Roses.



Primer plato fuerte del escenario principal. The Vaccines.



Una alegres groupies de The Vaccines.



Sziget Eye.



Áreas de recreo en el Sziget.



Escenario Blues Jazz en el Sziget.



The XX en el escenario principal.



The XX tocando temas de su segundo disco.



Cayó la noche, el Sziget Eye iluminado y nosotros esperando al plato fuerte.



Y por fin a escena The Stone Roses, Ian Brown cantando I wanna be adored.



El público entregado en The Stone Roses con banderas de varios países ondeando.



Ramoniano hipster seguidor del british pop.



Una pequeña groupie dándolo todo por los Stone Roses.



Fachada del Sofitel, después de muchas horas volvíamos a casa para un merecido descanso.

The XX cantando 'Stars' en el final del concierto.



The Stone Roses cantando 'Love Spreads', temazo!!!




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